Los nuevos medios de transporte, el coche eléctrico.

En esta nueva publicación del blog de Eficiencia Energética Navarra vamos a tratar el tema de los vehículos eléctricos. Las diferencias entre los diversos modelos, así como sus ventajas y desventajas frente a los vehículos que utilizan combustibles fósiles.


Para empezar hay que diferenciar entre los tres modelos de motorización de los coches que llamamos "eléctricos". Dentro de este mundo existen diferentes variaciones que se podrían agrupar de la siguiente manera:

Coches híbridos.

Este tipo de vehículos son los que más acostumbrados a ver por las calles de nuestras ciudades y funcionan combinando el motor de combustión con uno eléctrico. Dentro de esta categoría encontramos el conocido Toyota Prius, la potencia la entrega el motor eléctrico hasta ciertas revoluciones y pasado un límite entra en funcionamiento el motor de gasolina. En las frenadas o cuando se mantiene una velocidad constante con el motor de gasolina funcionando el sistema aprovecha para cargar las baterías del motor eléctrico.

Coches eléctricos de baterías.

A diferencia del modelo híbrido, el coche eléctrico de baterías solo cuenta con un motor eléctrico y unas baterías recargables. Estas son las partes más importantes del sistema:

• Motor: puede tener uno o varios, dependiendo del diseño. También recupera energía (inversor).
• Puerto de carga: recibe la electricidad del exterior, puede haber otra toma específica para carga rápida.
• Transformadores: convierten la electricidad de una toma casera o de recarga rápida en valores de tensión y amperaje válidos para el sistema de recarga. No sólo rellenan las baterías, también se preocupan de la refrigeración para evitar riesgo de explosión o derrames.
• Baterías: el depósito de “combustible”. Puede haber una batería auxiliar como la de cualquier coche convencional para sistemas de bajo consumo auxiliares.
• Controladores: comprueban el correcto funcionamiento y controlan la eficiencia y seguridad. Además regulan la energía que recibe o recarga el motor.

Autonomía.

Hay que tener en cuenta cómo y por dónde se conduce, puesto que el baremo de autonomía no es siempre igual. En general, la autonomía de estos vehículos ronda entre 100 y 200 km, entre los que destacan algunos como el Tata Indica Vista que anuncia una autonomía de 200 km y el BYD E6 que anuncia 400 km de autonomía.

Coches de hidrógeno.

Finalmente, el vehículo de hidrógeno cuyo funcionamiento se basa en la generación de electricidad a través de una pila de combustible alimentada con hidrógeno. El espacio que ocupaban las baterías ahora lo ocupa un depósito de hidrógeno a altas presión.

El hidrógeno se oxida y los electrones que este pierde es la corriente eléctrica que circulara a través de pilas de combustible que mueven motores eléctricos - de esta manera, la pila de combustible funciona como una especie de batería.

Existe también el vehículo de hidrógeno con motor de combustión pero el de pila de hidrógeno se considera de emisiones-cero ya que la reacción química solo genera como subproducto agua. Siempre hay que tener en cuenta que la producción de hidrógeno es muy costosa energéticamente y por ello dependiendo de la forma de producción del hidrógeno dependerá de si este es un producto limpio o no.